Jeremías 1:5 (NVI)
5) Antes de formarte en el vientre, yo te había elegido; antes de que nacieras, yo te había apartado; te había nombrado profeta para las naciones.
¡Que hermoso es descansar en las palabras de nuestro Rey! Al igual que el profeta Jeremías hemos sido escogidos por Dios para llevar el mensaje del Reino al pueblo. Nuestro Dios tuvo el detalle y un amor tan especial por nosotros que aún cuando no habíamos sido formados en el vientre de nuestras madres, el gran Yo soy ya nos había pensando, elegido y aún más, nos había apartado para su reino. El hecho de que Dios tomará de su tiempo para pensar en nosotros es más que un simple detalle, es una responsabilidad. Tenemos la responsabilidad entonces de tomar en serio el llamado que Dios nos ha hecho.
Dice la palabra de Dios en el versículo 6 de ese mismo capítulo: “¡Ah, Señor mi Dios! ¡Soy muy joven y no sé hablar! Obvio, Jeremías al igual que nosotros, busco excusas para no obedecer al llamado de Dios, tal vez tuvo miedo, pensó quizás que no estaba capacitado para ejercer su ministerio o cuantas cosas pasaron por su cabeza. Pero Dios quien conoce nuestros pensamientos y fidelidad le dijo a Jeremías y hoy a nosotros sus hijos, «"No digas soy muy joven", porque vas a ir a dondequiera que yo te envíe y vas a decir todo lo que yo te ordene. "No temas a nadie, que yo estoy contigo para librarte.» ¡Dios tiene el control de todo! Esas palabras dichas por Dios a Jeremías tienen que haber sido de aliento, confianza y paz para él. Me imagino que tuvo un gran suspiro pues entendió su encomienda. ¿Sabes tú cuál es tu encomienda? ¿Entiendes el llamado de Dios para ti? ¿Estás dispuesto a seguir el llamado de Dios? Recuerda que Dios te eligió antes de formarte en el vientre; antes de que nacieras, ya te había apartado; te había nombrado profeta para las naciones. ¡Que honor, vivir para servir en la obra del gran Yo soy, nuestro Rey y Señor!
Servir fielmente, obedecer la voz de Dios y recibir discipulado en la casa que nos ha puesto son parte del proceso de Dios en nuestras vidas, recibamos con humildad nuestra encomienda y tengamos siempre un corazón dispuesto a servir, adorar y predicar el evangelio. Hoy Dios nos dice «He puesto en tu boca mis palabras. Mira, hoy te doy autoridad sobre naciones y reinos, "para arrancar y derribar, para destruir y demoler, para construir y plantar"», Jeremías 1: 9 y 10. Tenemos la autoridad para declarar y decretar paz en nuestra tierra, salud al enfermo y prosperidad en medio de las circunstancias adversas. ¡Nuestra tierra sufre, la gente vive el día a día con miedo, hay gran necesidad! Dios nos ha escogido para llevar paz a las naciones y a proclamar la verdad.
Hoy Dios nos dice: "Porque Yo el Señor tu Dios, te he tomado de la mano, yo te he dicho: No tengas miedo, yo te ayudo". Isaías 41:13. Tener presente que Dios nos ha escogido y saber que el nos ha tomado de la mano es suficiente para levantarnos, prepararnos e ir a dondequiera que Él nos envíe. Recuerden hoy Dios nos dice "Yo te escogí".
¡Lindo Día!
Bendecidos
¡Que hermoso es descansar en las palabras de nuestro Rey! Al igual que el profeta Jeremías hemos sido escogidos por Dios para llevar el mensaje del Reino al pueblo. Nuestro Dios tuvo el detalle y un amor tan especial por nosotros que aún cuando no habíamos sido formados en el vientre de nuestras madres, el gran Yo soy ya nos había pensando, elegido y aún más, nos había apartado para su reino. El hecho de que Dios tomará de su tiempo para pensar en nosotros es más que un simple detalle, es una responsabilidad. Tenemos la responsabilidad entonces de tomar en serio el llamado que Dios nos ha hecho.
Dice la palabra de Dios en el versículo 6 de ese mismo capítulo: “¡Ah, Señor mi Dios! ¡Soy muy joven y no sé hablar! Obvio, Jeremías al igual que nosotros, busco excusas para no obedecer al llamado de Dios, tal vez tuvo miedo, pensó quizás que no estaba capacitado para ejercer su ministerio o cuantas cosas pasaron por su cabeza. Pero Dios quien conoce nuestros pensamientos y fidelidad le dijo a Jeremías y hoy a nosotros sus hijos, «"No digas soy muy joven", porque vas a ir a dondequiera que yo te envíe y vas a decir todo lo que yo te ordene. "No temas a nadie, que yo estoy contigo para librarte.» ¡Dios tiene el control de todo! Esas palabras dichas por Dios a Jeremías tienen que haber sido de aliento, confianza y paz para él. Me imagino que tuvo un gran suspiro pues entendió su encomienda. ¿Sabes tú cuál es tu encomienda? ¿Entiendes el llamado de Dios para ti? ¿Estás dispuesto a seguir el llamado de Dios? Recuerda que Dios te eligió antes de formarte en el vientre; antes de que nacieras, ya te había apartado; te había nombrado profeta para las naciones. ¡Que honor, vivir para servir en la obra del gran Yo soy, nuestro Rey y Señor!
Servir fielmente, obedecer la voz de Dios y recibir discipulado en la casa que nos ha puesto son parte del proceso de Dios en nuestras vidas, recibamos con humildad nuestra encomienda y tengamos siempre un corazón dispuesto a servir, adorar y predicar el evangelio. Hoy Dios nos dice «He puesto en tu boca mis palabras. Mira, hoy te doy autoridad sobre naciones y reinos, "para arrancar y derribar, para destruir y demoler, para construir y plantar"», Jeremías 1: 9 y 10. Tenemos la autoridad para declarar y decretar paz en nuestra tierra, salud al enfermo y prosperidad en medio de las circunstancias adversas. ¡Nuestra tierra sufre, la gente vive el día a día con miedo, hay gran necesidad! Dios nos ha escogido para llevar paz a las naciones y a proclamar la verdad.
Hoy Dios nos dice: "Porque Yo el Señor tu Dios, te he tomado de la mano, yo te he dicho: No tengas miedo, yo te ayudo". Isaías 41:13. Tener presente que Dios nos ha escogido y saber que el nos ha tomado de la mano es suficiente para levantarnos, prepararnos e ir a dondequiera que Él nos envíe. Recuerden hoy Dios nos dice "Yo te escogí".
¡Lindo Día!
Bendecidos
Por: Débora E. Portalatín ©
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