miércoles, 25 de noviembre de 2009

Nuestra Confianza está en tí, Jehová


Salmo 33: 20-22 (NVI)

²º Esperamos confiados en el Señor; él es
Nuestro socorro y nuestro escudo.
²¹ En Él se regocija nuestro corazón,
Porque confiamos en su santo nombre.
²² Que tu gran amor, Señor, nos acompañe
Tal como lo esperamos de ti.

Podríamos definir confianza como creer, recibir apoyo, entregar o tener fe en alguien.

¡Confiar! ¡Que difícil! ¿Cuántas veces has confiado en alguien y te ha decepcionado? ¿Te ha defraudado o hasta peor te ha puesto en vergüenza delante de otras personas? Pienso, que de una forma u otra a todos nos has sucedido esto. Y no es para ninguno de nosotros desconocido los sentimientos que esto provoca, coraje, dolor, tristeza y muchos otros más. Es más, es muy probable que digas “No vuelvo a confiar en nadie”, ahora soy yo, yo y yo. Pretendemos aislarnos de todos porque pensamos que todos nos van a defraudar y para que esto no suceda mejor me aíslo y no confío en nadie. Evito confiar en alguien para no volver a ser lastimado.

En el mundo físico debemos tener discernimiento y saber quien es nuestro verdadero amigo y debemos pensar bien y hasta analizar lo que debemos decir o no a aquellos que consideramos nuestros amigos. Debemos saber cuanto podemos confiar en las personas. Si miras a tu alrededor siempre hay gente hermosa que Dios ha puesto a tu lado con propósitos muy hermosos, gente en la que puedes confiar y ofrecer tu amor. Tienes a tus padres, hermosos seres en quien siempre podrás confiar. Yo por ejemplo, con todo lo que amo a mis padres se me hace difícil decirles situaciones por las que estoy pasando, confiarle mis problemas es algo que evito porque no quiero causarles dolor, tristezas o angustia. Pero cuando por fin les digo lo que me ocurre, siento que una gran carga se va y siempre cuento con sus consejos sabios, con sus manos para levantarme y sostenerme y sobre todo con su amor.

Pero hay noticias mejores que esas hoy, tenemos a Dios en quien siempre, SIEMPRE podemos confiar, Él no nos va a decepcionar. Como sus hijos debemos tener plena confianza en Él. Como dice el Salmo 33 Él es nuestro socorro en tiempos de angustia y es nuestro escudo en tiempos difíciles. Nuestro Dios nunca nos dejará, nuestra confianza debe estar centrada en Él, nuestro Gran Yo Soy conoce todo de nosotros. Pero, nosotros debemos tener la plena confianza de hablarle, decirle, pedirle y clamar ante Él por todo. Su mano está extendida para levantarte y sostenerte siempre.

Cierto es que, cuando nuestra confianza esta depositada y centrada en Dios en medio de toda circunstancia, en medio del dolor, de la angustia, de la pobreza, de la necesidad nuestro corazón se regocija. Porque hemos reconocido que el Poderoso de Israel es nuestro sustento, nuestra alegría, nuestra riqueza y nuestra gran verdad. No tenemos porque temer porque nuestra confianza esta en Él.

La Biblia nos muestra ejemplos claros y hermosos de lo que lo que es confiar en Dios:

1. El Salmo 37:5 nos dice “Encomienda a Jehová tu camino y confía en Él y Él hará. Deposita tu vida en Jehová y rinde tu vida a Él. Cada paso que des, cada cosa que desees hacer y lo que piensas es bueno para ti ponlo en las manos de Dios, encomienda todo a Él y Él hará conforme a su propósito en tu vida.

2. Salmo 40: 4 Bienaventurado el hombre que puso á Jehová por su confianza, Y no mira á los soberbios, ni á los que declinan a la mentira. Nuevamente, nos insta la palabra de Dios a poner nuestra confianza en Dios y no en los hombres. El hombre falla pero Dios es fiel y su misericordia es eterna.

3. Proverbios 3: 26 Porque Jehová será tu confianza, Y él preservará tu pie de ser preso. Sí Jehová es y será nuestra confianza en todo tiempo y en todo lugar y nos cuidará de todo aquello que pueda causarnos daño.

4. Proverbios 16: 20 El que está atento a la palabra encontrará la dicha, y ¡feliz el que confía en el Señor!
¡Gloria a Dios! Consejo hermoso y una gran verdad, la lectura diaria de la Palabra de Dios nos dará las herramientas necesarias para vivir en el propósito de Dios y como consecuencia encontraremos la dicha y seremos felices porque nuestra confianza está en el Señor.

5. Jeremías 17: 5-8 (5) Así habla el Señor: ¡Maldito el hombre que confía en el hombre y busca su apoyo en la carne, mientras su corazón se aparta del Señor! (6) Él es como un matorral en la estepa que no ve llegar la felicidad; habita en la aridez del desierto, en una tierra salobre e inhóspita. (7) ¡Bendito el hombre que confía en el Señor y en él tiene puesta su confianza! (8) Él es como un árbol plantado al borde de las aguas, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme cuando llega el calor y su follaje se mantiene frondoso; no se inquieta en un año de sequía y nunca deja de dar fruto.

Nuestra confianza debe estar puesta en todo momento en nuestro Poderoso Dios. Nada debe apartar nuestra mirada y confianza de Él. La Biblia nos da la clave en lo que respecta a la confianza. El libro de Jeremías en el Capitulo 17 nos da la llave de la confianza: ¡Maldito el hombre que confía en el hombre y busca su apoyo en la carne, mientras su corazón se aparta del Señor!, si ponemos nuestra confianza en el hombre y nos olvidamos y alejamos de Dios, nada podrá salirnos bien y tendremos grandes decepciones. Pero, el versículo 7 nos da la gran esperanza de Dios para nuestras vidas, ¡Bendito el hombre que confía en el Señor y en Él tiene puesta su confianza!, pase lo que pase, vengan fuertes vientos, vengan tormentas, vengan temblores y terremotos, nuestras raíces espirituales se extenderán hasta el Reino de Dios y no temeremos a nada porque nuestra confianza esta puesta en el Rey Poderoso y Majestuoso, nuestro Dios. No temas ni desmayes, no desesperes, pon tu confianza en Jehová, Él está atento a ti y su mano esta extendida para levantarte, sostenerte y colocarte en lugar de honra.

¡Seas Poderosamente Bendecido!
Por: Debbie E. Portalatín Rosario

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